Establecido en 2013, el Oficiului Național pentru Jocuri de Noroc comenzó a monitorear los juegos de azar en Rumania de manera más estricta desde la segunda mitad de 2015 en adelante. Si bien los servicios de juegos de azar en línea están permitidos en el país desde 2014, no existen restricciones para jugar en casinos extranjeros. Aunque esto les dio a los jugadores rumanos el lujo de elegir, también generó problemas como el lavado de dinero, la pérdida de ingresos fiscales y la falta de protección para los jugadores rumanos.
Hoy en día, el panorama de los juegos de azar y las actividades de juego en línea en Rumania se ve muy diferente. Desde máquinas tragamonedas y juegos de mesa hasta bingo y sorteos, todas las formas de juego en los casinos físicos y en línea requieren licencias de juego para operar. Para que un sitio web de apuestas pueda ofrecer legalmente sus servicios a los jugadores, primero debe obtener una Licencia ONJN Clase 1.
Esto se emite temporalmente por 1 año, y puede extenderse a 10 años después. Además, además de los operadores, todos los proveedores de software, así como ciertas empresas de marketing y publicidad, también deben obtener una licencia. Está claro que la ONJN se está tomando su papel muy en serio y está haciendo que los juegos de azar sean más seguros y estén más regulados para los jugadores rumanos.